Han regresado ya los que se fueron, la muscaria y el cuervo, ahora, cuando en marzo puede oírse el chillido del grajo.
Pero si esto es otoño o primavera no sabría decirlo ... hay una parte de mí para la que las nueces han madurado ya, y en otra parte es mayo.
Hay una soledad en el espacio, la soledad de la mar, la de la muerte,
pero todas éstas acaban pareciendo compañía si se comparan con el más recóndito de todos los lugares,
el retiro polar del alma conociéndose a sí misma.
Lo infinito con fin.
Pero si esto es otoño o primavera no sabría decirlo ... hay una parte de mí para la que las nueces han madurado ya, y en otra parte es mayo.
Hay una soledad en el espacio, la soledad de la mar, la de la muerte,
pero todas éstas acaban pareciendo compañía si se comparan con el más recóndito de todos los lugares,
el retiro polar del alma conociéndose a sí misma.
Lo infinito con fin.
... ese mismo verano intima con otra actriz, Shelley Winters que está rodando la que será su película más famosa A Place in the Sun (1951) junto a Monty Cliff.
ResponderEliminarShelley tiene mucha más experiencia que Marilyn. Su sexualidad a flor de piel y exuberante vitalidad le hacen vivir intensamente y ambas comparten muchos secretos que en aquellos años hubiesen escandalizado a la pacatas mentalidades de la época.
Winters ha conquistado a Ronald Colman, Marlon Brando, Burt Lancaster, Errol Flynn, William Holden y Howard Hughes.