viernes, 30 de enero de 2015

Música, Música, Música ... su poder

En su origen el mundo fue un gran golpe de címbalo,
con los vientos discordes en el niño universo.
Toda música fue como un solo sonido
en los huecos peñascos y en las fuentes cantoras.
El Creador hizo acordar los sonidos más ásperos,
modulando una música con tañer de trompetas:
arrancó de lugares muy sombríos el eco,
y allí donde habitó supo construir órganos,
En tan grato lugar todo se emparejó,
así vírgenes tiples con los bajos viriles.
De este modo nació la progenie melódica
que acabó por formar armoniosas familias.
Al laúd unos fueron, otros a la viola,
y hubo quien eligió la corneta elocuente
dedicándose al viento o pulsando las cuerdas,
cantos de gloria humana o de coros celestes.
Así acaba la música, cual mosaico del aire,
convirtiendo su canto en la sacra armonía
con la cual el imperio del oído conquista
abarcando el espacio entre cielos y tierra.
 

domingo, 18 de enero de 2015

¿Qué dirás esta noche, alma mía terrenal?

Hay perfumes que en toda sustancia material hallan poros.
Diríase que filtran el cristal.
Cuando abrimos un cofre que nos viene de oriente y cuya cerradura rechina agudamente, o en un cuarto desierto, un armario escondido lleno del acre olor del tiempo, envejecido, encontramos, a veces, un frasco que aún envuelve el perfume inextinto de un alma que nos vuelve.
Vagas ideas ... como abatidas crisálidas sobre él dormían en las tinieblas, inválidas, y al cogerlo se escapan en un vuelo sonoro, tintas de rosa, envueltas de azul ... láminas de oro.
He aquí el recuerdo:  pasa por el aire triunfante ... cierra nuestras pupilas ... vértigo deslumbrante se apodera del alma y la empuja a dos manos ... al abismo en que duermen los dolores humanos.
Ella contempla el negro abismo centenario, y como embalsamado que rompe su sudario ... se le desvela el mudo cadáver espectral de un viejo amor, ya rancio ... discreto y sepulcral.
Mañana, cuando extintos mi dolor y mi estro, yo esté hundida en el fondo del armario siniestro, y los hombres me olviden y me arrojen con asco ... decrépita, viscosa, sucia como hendido frasco ... yo he de ser tu sepulcro, testigo de tu fuerza y de tu virulencia.
 

miércoles, 7 de enero de 2015

Mis preguntas se han cansado de mentir

El vacío es un triste compañero para el amor.
No hay cofre que lo guarde.
Por el humo se sabe en dónde arde el fuego de un amor ... si es verdadero.
No grito por las calles que te quiero ... pues no es cosa de hacer ningún alarde.
Tú vas en mí, y en tu mirar la tarde, y ... en los dos un silencio traicionero.
Bien sabes que es verdad.
Proclamaría lo que me das ... lo que me has dado ... todo aquello que en mis sueños es tenerte.
Y, sin vivirlo nunca, viviría lo que vivir no puedo de otro modo
... el trámite vulgar de conocerte.