jueves, 26 de diciembre de 2019

La realidad, por mucho que viajemos

Morí por la Belleza, pero apenas ahormada en la tumba,
otro murió por la Verdad, y estaba en un lugar contiguo.
Me preguntó en voz baja: "¿De qué has muerto?"
Dije: "Por la Belleza"
"Pues yo por la Verdad. Y son lo mismo"
Añadió: "Hermanos somos"
Así, como parientes que se encuentran de noche ... conversamos.
Hasta que el musgo nos llegó a los labios y cubrió nuestros nombres.
Tengo en cuenta, si empiezo a enumerar, primero los poetas, luego el Sol, el verano y el Cielo de Dios; luego ... se ha acabado la lista.
Pensándolo mejor, es lo primero entender el conjunto. Pues lo demás es la pompa superflua.
Escribo los poetas, después todo.
Su estío dura un año verdadero.
Pueden traer el Sol, el Oriente sería ya un derroche.
Y si el Cielo futuro es tan bello como el que ellos disponen para los que les honran, me parece demasiado difícil como don
... si ha de justificar todo este sueño.

lunes, 16 de diciembre de 2019

Carta a la luna

Me hicieron acercar a la ventana por la puesta de sol, eso dijeron.
Sólo vi una alquería color ámbar y un rebaño opalino paciendo allí a lo lejos, en un cerro ilusorio, porque mientras miraba el rebaño y la tierra se esfumaron
... un mar vi aparecer en aquel sitio, con barcos tan enormes como para poder tener por tripulantes las montañas ... y que sobre cubierta descansaran los cielos.
Después, el director del espectáculo otra vez borró aquello, y al volver a mirar ya no había alquería
ni rebaño opalino
ni mar Mediterráneo.

miércoles, 11 de diciembre de 2019

Creo que acabo de tocar la verdad

Señor, ata mi vida con correas, cuando quieras nos vamos;
una última ojeada a los caballos, en marcha, todo listo.
Señor, ponme en el sitio más seguro para que no me caiga;
porque se trata de acudir al Juicio ... y parte del camino es cuesta abajo.
Aunque no tengo miedo a ningún puente ni tampoco a la mar;
porque en el viaje eterno me sujetan mi voluntad y Tú.
Adiós a la costumbre de vivir y al mundo conocido;
da un beso de mi parte a las colinas
... cuando quieras nos vamos. 

martes, 3 de diciembre de 2019

Escribo estas cosas por la noche

Por fin vendrá el verano.
Señoras con sombrillas, caballeros paseando con bastones y niñas con muñecas darán color al lívido paisaje igual que un pomo de vistosas flores ... aunque hoy sumida en grises permanece la aldea.
Las lilas, tantos años doblegadas, sacudirán el peso de su púrpura ... las abejas no van a renunciar al canto que aprendieron de la especie.
Y la rosa silvestre en el pantano se coloreará, como el aster lucirá en la colina su perenne belleza entre gencianas que se rizan.
Luego el verano guarda sus prodigios como su ropa doblan las mujeres o el clérigo retira los objetos de culto
... una vez terminado el Sacramento.