domingo, 22 de noviembre de 2020

Deseamos

Aunque mis duras pestañas den a mi rostro moreno perversidades extrañas, bruja de mirar sereno, me adoras, oh mi terrible pasión, con la misma devoción que un fiel devoro a María.
De mi cabeza refringe olor a selva y desierto; tengo el misterio incierto del enigma y de la esfinge; huele mi carne de raso como incensario bendito, y, encanto como el ocaso, ninfa de ardor infinito.
La pereza en que te vicio vale todas las delicias de los filtros descubiertos, y, conozco las caricias que resucitan los muertos.
Mis flancos buscan amantes de tibio dorso y los senos; mis posturas suplicantes dejan los cojines llenos, siniestramente gobierno las rachas de tu locura, y, por no cansarme, alterno el beso y la mordedura.
Si mi agria risa importuna te hiere a veces, querido, sabe envolverte la herida mi dulce mirar de luna.
Bajo mi blanco escarpín y bajo mis pies en flor, pongo tu dicha y mi amor, y tu principio y mi fin.

1 comentario:

  1. ... para complicar aún más la tensa situación, los recién casados se desayunaron con la noticia airada en toda la prensa, que el arzobispo había excomulgado a Joe DiMaggio por su divorcio y posterior casamiento civil.

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