El cielo está tan lejos de la mente
que si ésta se llegara a disolver
el lugar donde está ya no podría
encontrarlo de nuevo el arquitecto.
Es tan grande como lo imaginamos
y tan hermoso como nuestra idea;
para quien lo desea justamente
tan cerca de nosotros que está aquí.
Lo que yo pueda hacer eso lo haré,
aunque sea fugaz como un narciso;
lo que no pueda hacer ha de quedar
desconocido para lo posible.
... todos los amigos sufren con ella el rechazo, y lo que representa para la actriz el no poder conocer sus orígenes, una lacra que llevará consigo a la tumba. Cuando la realidad era que el verdadero padre de Marilyn no era John N. Baker ni Stanley Gifford, sino el segundo marido de su madre, el noruego Martin Edward Mortensen, a quien se había dado por muerto en accidente de moto el año en que Norma Jean había nacido.
ResponderEliminarEn la enmarañada trama de su vida, el misterio de Mortensen y de su relación con Marilyn, iba a ser el último eslabón de una cadena de melodramas.