Ojos grises, ausentes, que crepitan en sus órbitas amplias, desiguales.
Una ceja que en parte se inclina sobre el ojo porque encierra todavía una esquirla ... piel adentro ... como un recuerdo necio de la lucha de un viejo mundo.
Nariz rota, aguileña: un mal placaje la causó.
Surcadas mejillas.
Basta pelambre gris que revolotea loca.
Frente arrugada y alta.
Carrillos prominentes.
Las orejas ... grandes.
Y la mandíbula, de púgil.
Dientes pocos.
Labios gruesos.
Boca ascética.
Me detengo con la navaja en ristre, frunciéndole el ceño, mofándome del hombre del espejo cuya barba requiere mi atención, y ... otra vez le pregunto por qué sigue dispuesto, con la presunción de un mozo ...
a cortejar a la reina en su dosel de seda.
Una ceja que en parte se inclina sobre el ojo porque encierra todavía una esquirla ... piel adentro ... como un recuerdo necio de la lucha de un viejo mundo.
Nariz rota, aguileña: un mal placaje la causó.
Surcadas mejillas.
Basta pelambre gris que revolotea loca.
Frente arrugada y alta.
Carrillos prominentes.
Las orejas ... grandes.
Y la mandíbula, de púgil.
Dientes pocos.
Labios gruesos.
Boca ascética.
Me detengo con la navaja en ristre, frunciéndole el ceño, mofándome del hombre del espejo cuya barba requiere mi atención, y ... otra vez le pregunto por qué sigue dispuesto, con la presunción de un mozo ...
a cortejar a la reina en su dosel de seda.
Me reconozco incapaz de soportar a nivel literario (personalmente no le conocí)a Arthur Miller. Demasiado espeso para mi gusto, y sus acciones a nivel personal me producían la certeza de un ser ególatra que acometía sus actos con previsión milimétrica para su beneficio ... sin importar a quien dejaba en el camino.
ResponderEliminarNorma Jeane fue un reto que durante cuatro años persiguió y a la semana de su boda ya dijo que era su mayor equivocación.
Es la única imagen que tengo de ellos en mi archivo.
Es una sencilla y puede que equivocada animadversión ... no lo siento.