jueves, 19 de julio de 2012

Wordsworth

IX

Así como a veces vemos una piedra enorme
apoyada en el pico de una cima calva
y todos los que la encuentran se maravillan
de cómo pudo llegar allí y de dónde;
hasta el punto que parece dotada de sensibilidad
como una bestia marina que se hubiera arrastrado
hasta reposar en un saliente de roca o arena, para tomar el sol;

X

así, en su vejez extrema, el hombre no parecía muerto
ni vivo del todo, ni completamente dormido;
su cuerpo se doblaba, su vida peregrina
le había acercado la cabeza a los pies;
como si una horrenda constricción de dolor, o rabia
enfermiza, experimentada desde un pasado remoto,
un peso sobrehumano, hubiese curvado su esqueleto.

1 comentario:

  1. Descubrí a W.W. en el catálogo de una galería de arte; estas líneas abrian la presentación de un pintor ... olvidé su nombre
    Yo tenía catorce años y forma parte de mi memoria
    Resolución e Independencia escrita en 1807.

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