La única luz de luna, en noche de color sencillo, como un simple poeta que en la mente da vueltas a la igualdad de su vario universo, brilla sobre la mera objetividad de las cosas.
Es como si ser fuera ser observado, como si, entre los posibles propósitos de lo que uno ve ... el que primero está ... la superficie, fuera el propósito de ser visto, la propiedad de la luna ... lo que ella evoca.
Es desvelar la presencia esencial, digamos, de una montaña..., extendida y elevada casi a un sentido, un objeto menos ... o bien desvelar en la figura que aguarda en el camino un objeto más ... una forma determinada entre encorvamientos de pistolero y amante
... algún gesto en lo obscuro, un temor que uno siente en grandes vistas de aire nocturno, el cual toma esta forma, en pérgolas que son como de estrella de Saturno.
Así que esta templada ... dilatada ... atemperada quietud está activa por un poder, una vida inherente, a pesar de la mera objetividad de las cosas, cual corona de nubes en la esquina de un espejo, un cambio de color en la mente del simple poeta, noche y silencio perturbados por un sonido interior, la única luz de luna, el vario universo, pensado hasta tal punto solo para ser visto ... un propósito, vacío acaso, absurdo acaso, pero al menos un propósito, cierto y más nuevo cada vez
... hummm, cierto, desde luego ...
Es como si ser fuera ser observado, como si, entre los posibles propósitos de lo que uno ve ... el que primero está ... la superficie, fuera el propósito de ser visto, la propiedad de la luna ... lo que ella evoca.
Es desvelar la presencia esencial, digamos, de una montaña..., extendida y elevada casi a un sentido, un objeto menos ... o bien desvelar en la figura que aguarda en el camino un objeto más ... una forma determinada entre encorvamientos de pistolero y amante
... algún gesto en lo obscuro, un temor que uno siente en grandes vistas de aire nocturno, el cual toma esta forma, en pérgolas que son como de estrella de Saturno.
Así que esta templada ... dilatada ... atemperada quietud está activa por un poder, una vida inherente, a pesar de la mera objetividad de las cosas, cual corona de nubes en la esquina de un espejo, un cambio de color en la mente del simple poeta, noche y silencio perturbados por un sonido interior, la única luz de luna, el vario universo, pensado hasta tal punto solo para ser visto ... un propósito, vacío acaso, absurdo acaso, pero al menos un propósito, cierto y más nuevo cada vez
... hummm, cierto, desde luego ...
No siempre la noche es sinónimo de esa heterogénea forma de ver el Universo ... puedes asistir con la misma sensación con el dios sol.
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