Sólo una vez supe para qué servía la vida.
Era de noche y, de repente, lo entendí.
Caminé y observé las luces mimetizándose, todas de neón, luces estroboscópicas ... abriendo sus bocas como cantantes de ópera.
Conté las estrellas, mis pequeñas defensoras ... mis cicatrices de margarita, y comprendí que paseaba mi amor por la orilla verde noche, y ... lloré.
Vacié mi corazón hacia las noches del este, y ... lloré.
Vacié mi corazón hacia las noches del oeste, y ... llevé
... mi verdad sobre un pequeño puente encorvado y apresuré mi verdad, su encanto, hacia casa y atesoré estas constantes hasta el amanecer
... sólo para descubrir que se habían ido.
Era de noche y, de repente, lo entendí.
Caminé y observé las luces mimetizándose, todas de neón, luces estroboscópicas ... abriendo sus bocas como cantantes de ópera.
Conté las estrellas, mis pequeñas defensoras ... mis cicatrices de margarita, y comprendí que paseaba mi amor por la orilla verde noche, y ... lloré.
Vacié mi corazón hacia las noches del este, y ... lloré.
Vacié mi corazón hacia las noches del oeste, y ... llevé
... mi verdad sobre un pequeño puente encorvado y apresuré mi verdad, su encanto, hacia casa y atesoré estas constantes hasta el amanecer
... sólo para descubrir que se habían ido.
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