miércoles, 30 de marzo de 2016

Peces de colores

Esta es la llave para todo. La niña que hay en mí se está muriendo.
Nadando por el sur de nuestros mares descubrimos una pequeña gruta donde no había nadie ... entramos en ella, y ... dejamos que nuestros cuerpos perdieran toda su soledad.
Los peces en nosotros habían escapado ... a los peces reales no les importó ... no molestábamos su vida personal.
Con calma nos deslizamos sobre ellos y bajo ellos, desprendiendo burbujas de aire, globos blancos que flotaban hacia el sol.
Agua tan clara que podrías leer a través de ella.
Agua tan boyante que podrías flotar sobre tu codo.
El agua era mi extraña flor.
Uno debe imaginarse a una mujer sin toga ni pañuelo ... sobre un lecho profundo como una tumba.
Las paredes de esa gruta eran de todos los azules y tú dijiste: "Tus ojos son del color del mar, tus ojos son del color del cielo"
Y mis ojos se cerraron ... como si de repente estuvieran avergonzados.

martes, 29 de marzo de 2016

Carta de una desconocida

Se acabó, querido ya no me verás dudar más ni pasar cuidado por tus sentimientos ... ayer me convencí de que me amabas ... y de que amas como yo quiero ser amada.
En fín ... me has dado entre todas las pruebas ... la que dejará en mí mas fuerte impresión.
Entrastes mientras yo estoy escribiendo ... trato de ocultar las pocas palabras que había trazado ... ese misterio excita tu curiosidad ... el querer aclararlo era una consecuencia de tus ideas. Yo insisto ... tu insistes ... persisto en mis negativas ... la cólera te arrebata ... me haces mil cargos ... las ingurias los siguen muy de cerca ... de rabia rompes mi tintero ... el papel me es arrancado de las manos ... y sin querer leerlo ... lo haces pedazos.
Yo hubiera podido calmarte con una sola palabra ... te estaba escribiendo a tí.
Pero ... tu cólera tenía demasiados hechizos a mis ojos para querer calmarla ... te veo todavía hundido en un sillón ... abatido por las reflexiones mas crueles. Te levantas con vivacidad ... una mirada terrible es descargada contra mí.
Te vas jurando que me detestas.
 Nunca me habias parecido tan adorable ... jamás me habias dicho nada que me hubiera convencido ... tan fuertemente como aquello ... de ser amada ... de serlo con furor. Con qué avidez mi corazón observaba todas tus acciones ... cuanta dulzura hallaba en tus injurias.
Apenas habias salido me di prisa en recoger los pedazos del tintero y del papel ... un conquistador no huella las murallas que acaba de cañonear con tanta alegría como la que sentía yo al considerar aquellas preciosas pruebas de tu ira ... o mejor dicho ... de tu amor.
Si alguna vez llegas a serme infiel ... estos serán los testigos que yo presentaré para recordarte los sentimientos que tuviste para mí.
El gesto terrible con que te fuiste ... que hechizos no tenía para mis ojos ... me parecía estar viendo al dios de la guerra diciendo a Venus que la ama ... pero en tono que en otra causaría miedo y temor.
Por fín he encontrado un alma educada, orgullosa y altiva ... un corazón vehemente, celoso y arrebatado
... soy amada como deseaba serlo.

lunes, 28 de marzo de 2016

Lo bueno no debería ser tan breve

Las lágrimas del encuentro, y del encuentro,
el abrazo, y tus ojos cuando te besa,
eso querría profético cantarte,
y toda la gracia del amor mágico.
En verdad, joven alma, eres bella
también sola, pues se alegra de sí misma
y florece de su propio genio, y del querido
canto del corazón ... la hija de las Musas.
Pero otra cosa es el presente sagrado,
cuando tu genio se reconozca en la mirada del reencontrado,
cuando camines a sus ojos serena,
otra vez envuelta en una nube de oro.
Entretanto, piensa que le luce el sol,
que le consuela y amonesta, cuando duerme en el campo,
la estrella del amor, y que al cabo el corazón
siempre se reserva días felices.
Y cuando esté ahí y las aladas horas del amor
vuelen más y más rápido,
y se aproxime tu boda y embriagadoras
luzcan ya las estrellas de la felicidad,
no, amantes, no os envidio,
inofensivos como la flor que vive de la luz,
así viven gustosos de una bella imagen,
soñando ... dichosos y pobres los Poetas.

sábado, 26 de marzo de 2016

Volátil primavera

Me voy a comprar un día primaveral,
y cueste lo que cueste, después de disfrutarlo
venderé a cualquier precio y a cualquiera
haciendo, de esta suerte, útil mi filantropía.
Alquilaré también una estratosfera
y me regalaré con vientos apacibles,
dejaré de competir con los luceros
y fumaré tus besos junto al muro.
No ajaré insomne tu pijama, ni morderé
la almohada poseída, evitando
el tallado inesperado de la piedra.
Y así taraceando poemas
transcurriré el lapso de tu eclipse
... mascando relajada tu ausencia.

miércoles, 23 de marzo de 2016

Después de dos mil años me sigo preguntando ¿Por qué?

Has pasado mucho, y ahora descansas feliz; pronuncian con amor tu nombre deudos y forasteros, también yo te venero bajo la plateada corona de la vejez, rodeada de niños que maduran ... crecen ... florecen.
Tu alma tierna te ha procurado una larga vida y la esperanza que te ha sostenido en el dolor.
Pues eres serena y piadosa, como la madre que alumbró al mejor de los hombres ... al amigo de nuestra tierra.
Hummm, ya no saben cómo el supremo caminó entre el pueblo, y casi está olvidado que vida llevó.
Aunque unos pocos lo conocen y a menudo su imagen celeste les aparece y ... vuelve serena la más tormentosa época.
Perdonando a todos y sin ruido, pasó entre los pobres mortales ese hombre único de espíritu divino.
A ninguno de los vivientes era ajena su alma y soportaba en su pecho sufriente el dolor del mundo.
Intimó con la muerte y en nombre de los demás regresó victorioso desde el dolor y la pena hasta su padre.
También tú lo conoces, y sigues al sublime con fe ... paciencia ... serenidad.
Mira, a mí misma me han rejuvenecido las palabras infantiles y, como antes ... corren lágrimas de mis ojos.
Y otra vez pienso en los días idos hace mucho, y la patria regocija de nuevo mi ánimo solitario y ... también la casa donde crecí bajo tus bendiciones y donde, nutrida de amor ... medró más deprisa aquella niña.
Hummm, cuántas veces pensé que te alegrarías por mí, cuando me veía en el futuro ... activa en el ancho mundo.
No poco he intentado, y soñado, y se me estragó el corazón en ello ... pero vosotros lo sanaréis, queridos míos, y ... quiero aprender a vivir mucho tiempo ... como tú; pues la vejez es tranquila y piadosa.
Acudiré a ti, a que bendigas otra vez a la nieta
... para que cumpla como mujer lo que te prometió de niña.

viernes, 18 de marzo de 2016

Soneto para los amantes (Almas)

Dos amantes cuidan mi vigilia y maitinada,
en su duplicidad me imparto indivisible:
una en su donaire se entrega crepitante,
al otro a su imperativo asiento entusiasmo.
Por la anochecida cruje mi portal entreabierto,
con divina sensualidad me inclino hacia sus pechos;
a su marcha atraviesa el otro mi ventana
para mimoso vaciar su amor a mis espaldas.
En mi bigamia ando enloquecida
de colmada realización y complemento,
pues por tener poseo, entrego y me relleno
entre deliciosas diabluras que al tálamo
estremecen ... en recibo alternativo
de mi súcubo e íncubo santificados.

jueves, 17 de marzo de 2016

¿Dónde reside el Amor?

No necesito impresos, postales, ni papeles;
aún es más, me sobran acuarelas, óleos y temples
que de tanto quererte desmejoran la silueta.
La imaginación es la idónea para tu estadía.
Siendo así, de qué me sirven los marcos
o carpetas donde tú en ti misma no te alojas;
tampoco me encajan ... los sufragios
con el tiempo se decoloran y marchitan.
Tu sinceridad es el epítome del libro
que consigna los recados de mi signo
para al realizar el inventario introverso,
comprobar la correspondencia encuadrada
en mi estudio de pintor. Por ello te envío
mis modelos ... en ellos te reconocerás de inmediato.

martes, 15 de marzo de 2016

Al Este del Sol, al Oeste de la Luna

Agarrándome de nuevo el fuero me grito,
me insulto los espasmos, los vomito,
me muerdo la clavícula y me desdento,
trato de amordazarme el alma ... y ahí no llego.
Reto a las galaxias, las esputo
y les ajordo: ¡Guarras, embusteras
del seráfico orgasmo, alcahuetas!
¿Por qué me escogisteis de verdugo?
La ajusticié y ella era inocente.
Debíase a otros códigos, otras penas;
previsión vuestra era virtud en su cultura.
Redacté con tinta imborrable de la historia
en su escabroso apéndice, la sentencia contra
quien jamás cupiera ni cayese en desacato.

jueves, 10 de marzo de 2016

La amargura de tu áspera ausencia

Hasta que tú me llames no correrán las olas,
la brisa sin espuma se inhibirá de réplica,
la marea anonadada estoará el horizonte
y la arena aburrida se convertirá en guijarro.
Olvido la carlanga hasta que tú no me llames,
el dolor llegose a hipnotizarme
anestesiando llagas de espera, desodorando
bodegas de mi catinga caucásica,
porque escoger es renunciar, y a ti renuncio
siempre que comprometas la mirada
del botón de angustia u optimismo.
Lacerante la esclavitud a tu albedrío:
el amor es un psicópata
... no toma jamás responsabilidad del crimen.

martes, 8 de marzo de 2016

Reflexión

El bosque se precipita cuesta abajo
y semejantes a capullos penden
replegadas las hojas bajo las que
nacen flores en un suelo
no falto de elocuencia.
Entonces ha pasado
un Alma ... muchas veces reflexiona, más allá del paso,
en el sitio restante,
un gran destino dispuesto.

sábado, 5 de marzo de 2016

Nana para dormir ... y despertar

La nana que yo te canto
ni es de nardo ni alhelí,
la cantaban mis cojones
antes que entraras ahí.
Y antes que salir tú puedas
ausculta el gran corazón,
aprende a marcar los pasos
de quien recibe tu honor.
Seremos tres para el canto,
para el caballo, la hoz,
y defendernos sabremos
fertilizando el amor.
La nana que yo te canto
es de cal y dignidad,
ya la echan  en tres cines
... se titula LIBERTAD.

jueves, 3 de marzo de 2016

Partitura

Madmuasel Ciática ha acudido a verme,
declinando
guillarse
por ninguna razón.
Agencié
convencerla: los vecinos
cogitarán
osado
tarde:
se quejarán
al administrador:
"Su hamaca,
grande:
caben
bien
los frisuelos".
"Nadie
me ha percivido
... por un año a abrazarte
me someto".

martes, 1 de marzo de 2016

Déjame caer en el Amor

¿Íbamos a separarnos? ¿Nos parecía bien y juicioso?
¿Por qué, cuando lo hicimos, nos hororizó cual asesinato?
Humm, qué poco nos conocemos,
porque un dios reina en nosotros.
¿Traicionarlo a él, que nos creó a todos
la mente y la vida? ¿Al dios que anima
y protege nuestro amor?
De eso no soy capaz.
Pero el mundano entendimiento, se figura otra falta,
ejerce otro férreo culto, y otro derecho,
y el uso, día a día,
nos engaña el alma.
Ya lo sabía: desde que el miedo, arraigado y grosero,
separó dioses y hombres,
es preciso, para expiarlo con sangre,
que perezca el corazón de los amantes.
Deja que calle, no me hagas encarar más
lo mortífero, para que al menos me vaya en paz
a la soledad ...
¡y la despedida aún sea nuestra!